Y si alguno prevaleciere contra uno, dos le resistirán;
y cordón de tres dobleces no se rompe pronto.

martes, 1 de octubre de 2013

Ayer se cumplieron 8 meses desde la partida de mi bebe...Te amoo hijo!!
Han sido meses de búsqueda, de encontrarme a mí misma, de ver que quiero hacer, en que dedico mi tiempo, y creo que es lo mejor, en este transitar estoy segura que lo mejor es buscar dentro de uno mismo las herramientas para seguir adelante. He decidido emprender un nuevo estudio en Medicina Tradicional China, soy abogado pero quiero hacer algo diferente...y la vida tiene tiempo llevándome a otros horizontes, a esto me refiero, es necesario revisar que queremos hacer y una vez que encontremos ese camino accionar, trabajar en función de eso, no necesariamente es comenzar unos estudios sino algo sencillo, pongo un ejemplo: Desde hace 4 meses me he dedicado a sembrar hierbas aromáticas y hortalizas en mi huerto, ha sido para mi un alivio, me dispuse a preparar todo para la siembra, día a día reviso como va, colocarle agua, ver que reciben sol, y es un momento que me siento llena, completa, siento que las plantas me hablan, me piden agua, sol, que las pode y verlas crecer es sentirme llena porque en cada siembra esta mi hijo así como en la cosecha..es un manera de entregarme, de sentirme, aconsejo a quienes me leen y han vivido una situación como la mía, que se animen a sembrar...sentiras una liberación, porque estarás viviendo tu momento, tu día!

lunes, 8 de julio de 2013

Han pasado tres meses desde que publiqué este blog, he intentado escribir varias veces pero por múltiples razones no he terminado, agradezco a las personas que han ingresado y leído parte de mi historia, mi vivencia, es gratificante sentir que alguien que vive o ha vivido algo similar pueda verse reflejado, y creo firmemente que a pesar de las distancias y lo frío que pueda ser este medio, en un lugar se crea una conexión automática representada en una emoción, esa que estamos viviendo mutuamente.
Ya han transcurrido más de cinco meses desde la muerte de mi bebe, horas...días cargados de tantas emociones, como un carrusel... lo único que puedo decir es !Que complejos somos! Todo este proceso de duelo, de aprender a vivir nuevamente, me ha llevado a algo más que al nombre de este blog, al alencuentrocontigomisma...a mi encuentro, inevitablemente a mis raíces, a una búsqueda de mí misma, primero a tratar de conocerme, verme al desnudo, y es que cuando la vida te pone circunstancias como la pérdida de un hijo, hasta ahora la prueba mas grande, el dolor mas desgarrador, la entrega de lo mas preciado, no hay otra salida sino de buscar dentro de mi misma las herramientas, los recursos para seguir adelante, conocerme, valorarme como mujer, descubrir mi mundo, las potencialides, no tenerle miedo a mi intuición, que me acompaña desde que nací, que esta allí en mis entrañas y que en la medida que la alimento se convierte en una fortaleza. Decidí aprender de esta  experiencia, eso implica recorrer mis emociones, vivirlas, identificarlas, crecer junto a ellas, algo nada fácil!!!!!!
En este transitar he retomado la lectura de un libro: Mujeres que corren con lobos, de Clarissa Pinkola Estés, de gran ayuda para toda mujer, y en este momento de mi vida me he visto reflejada, plasmada en sus líneas. En el capítulo 2: La persecusión del intruso: El comienzo de la iniciación, narra el cuento de la Barba Azul -ojalá puedan leerlo- hay un párrafo que quiero compartir:

"...desde el punto de vista positivo, sólo la persistencia de la sangre en la llave induce a la psique a aferrarse a lo que ha visto, pues hay una censura natural de todos los acontecimientos negativos o dolorosos que ocurren en nuestras vidas. El ego censor desea con toda seguridad olvidar que ha visto la habitación y los cadáveres que en ella había. Por eso la esposa de Barba Azul trata de frotar la llave con crin de caballo. Echa mano de todo lo que puede, de todos los remedios de la medicina popular femenina para curar las laceraciones y las heridas profundas: las telarañas, la ceniza y el fuego, todos ellos asociados a la vida y la muerte que tejen las Parcas. Pero no sólo no consigue cauterizar la llave sino que tampoco puede poner término a la situación fingiendo que no existe. No puede impedir que la llavecita llore sangre. Paradójicamente, mientras su antigua vida muere y ni siquiera los mejores remedios consiguen disimularlo, la mujer despierta ante su propia hemorragia y, gracias a ello, empieza a vivir."   

 Cuando leí este párrafo fue inevitable llorar, porque cada palabra tenía un sentido para mí, lo viví, lo vivo, lo llevo conmigo, vienen a mi mente recuerdos, momentos auto-censurados que luego sin previo aviso se hacen presente y reviven mis horas de parto, nuestra muerte y nuestro renacer. 

lunes, 15 de abril de 2013


La muerte de un hijo.

Escrito por ADMIN-Jessica Ruidiaz | Parte de Espacio Psicológico | Escrito el 30-03-2013

“…En el curso de nuestra existencia vemos desaparecer para siempre la belleza del rostro y el cuerpo humano, mas ésta fugacidad agrega a sus encantos uno nuevo. Una flor no nos parece menos espléndida porque sus pétalos sólo estén lozanos durante una noche…” Sigmund Freud

La muerte de un hijo

imagesCAT18E0M¿Quién es un viudo o una viuda? Aquel que pierde a su pareja. ¿Quién es un huérfano? Aquel que pierde a sus padres, dos tipos de relaciones, la que mantenemos con aquellos que nos dieron la vida y la que mantenemos con aquellos que elegimos como compañeros de vida, pero ¿Qué pasa cuando un padre o una madre pierden un hijo? Tanto en español como en muchas otras lenguas, no existe una palabra para nombrarlos.  Podría pensarse con este no nominar es negar esta realidad, lo que no se nombra no existe, es parte del tabú social que ocurre con las muertes infantiles y neonatales.  Aún así el niño que ha muerto conserva un lugar en el discurso y en la vida de los padres, en la vida de una madre o un padre, el hecho de haber concebido un hijo, el haberlo tenido poco o mucho tiempo, deja una huella que permanece a pesar de su muerte, y que implica una marca subjetiva que va más allá de los ideales no realizados por ese hijo.
     Un niño antecede la existencia concreta del mismo, aparece primero en el deseo de los padres,  en cada pensamiento destinado a ese ser por venir, elegir un nombre, darle un espacio en la vida familiar, imaginar un sin fin de situaciones con ese bebe pero cuando la realidad trunca estos sueños y ese hijo no llega se produce el mayor dolor que puede sufrir un ser humano, por resultar antinatural, una persona se enfrentara a un sinfín de muertes y sabe de lo inevitable de esto, toda vida es un camino hasta el final, hasta la muerte pero no se espera de un ser que comenzaba a vivir entonces surge la inevitable pregunta de ¿Cómo seguir viviendo sin ellos?, todo padre que se encuentra en esta situación tendrá que transitar un proceso de duelo, un duelo que tiene principio pero como atravesarlo dependerá de la particularidad de cada familia, de cada pareja, de cada sujeto.
    “Felices aquellos que saben que detrás de todas las palabras esta lo que no se puede decir” (Rilke).  Parece que la sociedad al no nombrar esta parte de la realidad minimiza una muerte de acuerdo al tiempo de vida que haya tenido, ¿Acaso es menos valiosa la vida de quien se ha ido tan temprano? No, no lo es, hay un deseo de padres que queda roto, cada niño es considerado como insustituible, su muerte crea un caos en la estructura que se ha consolidado a su alrededor. El dolor y el duelo no tienen edad, el bebe que no está es una vida que se va, al igual que otras, pero en forma más abrupta, con un lugar en esos padres que lo esperaban.  El tiempo pasará, se aprenderá a vivir con el dolor, habrá que transitar este arduo camino ya que la vida sigue, y se incorporara como el hecho más desgarrador pero con el cual hay que aprender a convivir, las experiencias nuevas de la vida y el vinculo con los otros pueden ser de gran sostén para padres que atraviesan está perdida, deberá ser una responsabilidad social, como grupo humano no desconocer esto que sucede y brindar la contención apropiada.  Nombrar reafirma lo que existió, un ser esperado, amado y que nunca se ira de la memoria de quien lo soñó.
Equipo Psicológico Era en Abril
Hola...bienvenid@s a mi blogg!!!
Esta idea nace por la necesidad de expresarme, de compartir con otras mujeres el proceso que conlleva la perdida de nuestros bebés, nuestros angelitos que independientemente del tiempo que permanecieron con nosotras, nos llenaron de ilusión, de amor, de esas ganas inmensas de aprender y crecer junto a ellos.
Hoy mi Victor Hugo no está físicamente, pero sigo aprendiendo y creciendo junto a él. 
La imagen que aparece en el Blog es un cordón de tres dobleces -Biblia: eclesiastés 4:12-, quería de alguna manera representar lo que para mí es la unión entre dios, mi hijo, mi compañero de vida y yo, ese cordón que no se rompe fácilmente así es la unión entre nosotros. Agradecida estoy con la vida por tener a mi lado a este gran hombre, que representa para mi esa fortaleza, temple, entrega, amor, ternura, compresión, y que en estos momentos en el que siento que la tierra tiembla, que la vida se te pone chiquitica, esta presente para abrazarme, escucharme, vivir juntos este dolor, ser mi gran apoyo.
Mucho antes de ese anhelado "resultado positivo" ya estaba preñada de sueños, mi vientre reclamaba el deseo de acobijar a mi bebé, recordé unas palabras que me dijo una amiga: cuando llegue el momento lo sabrás, porque todo tu cuerpo, tu mente, tu espíritu te lo pedirá, y así fue.
Victor Hugo, mi angelito, estuvo en mi vientre por 22 semanas, lleno cada día de ilusión, de amor, de entrega, viví de manera consciente mis días, para mí no existía mañana, era ese día el que tenía que vivir y ahora lo entiendo, la vida me fue preparando para ese momento. A las 20 semanas de embarazo, en el eco morfológico le detectan a mi bebé una cardiopatía congénita: Síndrome del Ventrículo Izquierdo Hipoplásico (http://www.cardiopatiascongenitas.net/tipos_cc_n_hipoplasia_vi.htm), con pronóstico reservado. A las 22 semanas, un día jueves 31 de enero de 2013 muere mi bebé y sentí que la vida se me fue con él, quedé vacía.....y así han pasado los días, pero internamente una voz me dice que tengo que seguir adelante, con mi dolor a cuesta, con mis deseos de madre impregnados en la piel, con mis senos cargados de leche, pero tengo que seguir adelante, sin engañarme a mi misma, viviendo cada día porque así me enseñó mi bebe, los días "buenos" como los llamo yo, aprovecharlos y con ese impulso salir a la vida que sigue su curso y los días "no tan buenos" vivirlos igual, sentir el dolor, dejar que el cuerpo se exprese...es un proceso que lleva su tiempo, no me impongo, sólo he decidido vivirlo... como dicen por alli: "Todo pasa, lo bueno y lo malo pasa". En este proceso me aferro a Dios, la fe en él me ha hecho permanecer por encima de las circunstancias tan dolorosas, con mis fuerzas es imposible porque flaqueo, me tumbo, me desplomo, pero he sentido como de la nada renacen las fuerzas y sé que no soy yo!!!!.
Te amo mi bebe, mi Victor Hugo.